El Karatedo es un estilo de vida ya que no me hallo sin la práctica
de este arte marcial, se volvió uno conmigo, no puedo negar que cuando comencé lo
hice por acompañar a mi hermano y entrenaba por mantenerme en forma. Conforme
pasaron los días, los meses y años fue cambiando mi visión y concepción en
cuento a este. Hoy en día el Karatedo hace parte de mí, me ayuda en diferentes
aspectos de vida, por ejemplo me permite tener un buen estado físico, controla
mi peso, mantiene en forma mis articulaciones; en cuanto a mi actitud me ha
ayudado a mejorar mi carácter, ya no soy tan tímida, soy más disciplinada, es
una forma de canalizar mi malgenio, miedos, elimina el estrés y me permite ser más
segura; en cuanto a mi espiritualidad, la meditación me ha ayudado a
encontrarme conmigo mismo y valorar lo que me rodea.
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